No quiero saberlo, pero quiero hablarte.
Por qué seguiré dando vueltas a la idea de que vuelvas; se que no volverás a menos que te lo pida y no se si quiero pedírtelo, quizá por orgullo o por miedo a seguir pensando en ti y volver a sentirme como ya me has hecho sentir. Es que el corazón es tonto o simplemente te ha perdonado y te dió otra oportunidad; o se equivoca, pues él nunca se ha llevado bien con la razón.
Pelean y discuten siempre. Te confunden, te cuestionan, te hacen pensar y sentir al mismo tiempo emociones tan parecidas y tan iguales, que provocan esa sensación de llamar o no llamar, seguir o detenerse, olvidar o perdonar o llamar, seguir, olvidar y perdonar... pero siempre ellos dos se contradicen: son lo bueno y lo malo, el ángel y el diablo, el sí y el no... son el corazón y la razón. Por siempre rivales, eternos compañeros, enemigos de por vida con un usual vencedor que va de acuerdo al tamaño del corazón.
No quiero saberlo, pero ya te estoy hablando...
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
MUY BIEN XAVI, SIGUE , CONTINÚA, SOLO TE COMENTO QUE PODRIAS AGRANDAR LA LETRA O BIEN USAR MAYÚSCULAS, PORQUE EL QUE NO TENGA BUENA VISTA, YA SE LA .... OYE ESTOS COMENTARIOS SOLO TU LOS LEES, PORQUE NO QUIERO SER INDISCRETA. UN BESO
ResponderEliminar